sábado, 30 de julio de 2011

Respetando la masa critica.



                Tras el acuerdo entre la dirección y los trabajadores  de  ALSTOM,  me quedan algunos regustos, olores varios y algunas preocupaciones.

              Un regusto a servilismo y miseria, es el que se desprende de la actitud de la administración catalana y la seva conselleria de treball.  Ya no sólo han demostrado no ser capaces de defender los puestos de trabajo, ni la industria del ferrocaril en Catalunya. Es más, han estado  presionando con amenazas  con la resolución de despidos injustificados, poniendose al servicio de los intereses de la multinacional, que no son otros que los del capitalismo neocolonial,  que sólo contemplan el enriquecimiento a corto plazo y  sin ningún escrupulo.
         También ha quedado claro que es inhumano  mantener una negociación de 25 horas sin interrupción, que pretenden? el acuerdo por desfallecimiento? donde queda la ética de la mediacion? Necesitan un código deontológico para los mediadores.

        El otro hedor pestilento es el de la dirección de la empresa, con muy poca credibilidad  ni garantias de que cumplan lo acordado, utilizando el sadismo como política de recursos humanos. Y lo más preocupante, la  amenaza constante del cierre de la fábrica con desprecio y prepotencia.

        Por otro lado, el buen sabor del compañerismo y el compromiso en las movilizaciones demuestra la fuerza  con la que contamos los trabajadores. Si a eso le sumamos la fortaleza en las convicciones de los miembros del Comite de Empresa y su perseverancia, tenemos la explicación de como se puede llegar a transformar 390 despidos a 20 dias por año  en un acuerdo de reducción de plantilla, con  una serie de medidas dignas y mayoritariamente no traumáticas.

       En otro nivel de reflexión, pienso en lo enriquecedor que ha sido un proceso como éste para todos, pero especialmente para los miembros más jóvenes del comité y de la plantilla.
     
      No quiero dejarme en este potage de ideas, una mención especial a Emilio Penado, que ha demostrado una vez más, llevar el sindicalismo a flor de piel, tanto en la calle como en los despachos, como dicen ahora esos jóvenes, "un máquina".

    Lo cierto  es que este expediente, no ha sido ni el primero ni seguramente, será el último. Pero si que ha tenido unas connotaciones especiales, por la coyuntura económica y política y por la perversión en los plazos de consulta y negociación.  Nos debe servir  para adquirir experiencia  y seguir desarrollando un sindicalismo con respuestas,  propuestas y participativo.

jueves, 7 de julio de 2011

De la industria financiera a la cultura transformadora




Ellos recibieron nuestros aplausos , recococimiento y agradecimiento. Nosotros no oimos su resolución a favor de la industria ferroviaria en Catalunya y contra los despidos en ALSTOM, aun asi, estamos satisfechos con la movilizacion frente al Parlament de Catalunya. Y el 14 de julio a Madrid.